A mediados de abril las organizaciones de la sociedad civil Public Eye e IBFAN (International Baby Food Action Network) publicaron un reporte sobre el contenido de azúcares agregados en alimentos infantiles producidos por Nestlé y comercializados en distintos países del mundo.
Nestlé es una de las principales corporaciones alimentarias a nivel mundial, en particular, de fórmulas comerciales infantiles, cereales y papillas. Nido es una de sus marcas estrella, con 80 años en el mercado.
Los hallazgos del estudio revelaron un doble estándar de la compañía: mientras en países de bajos y medianos ingresos agrega azúcares a sus cereales y leches infantiles, en países europeos como Suiza y Alemania esos productos no las contienen.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que niños y niñas menores de 2 años no consuman azúcares agregados. Sin embargo, en América Latina, Asia y África, Cerelac y Nido se publicitan como productos saludables y beneficiosos para el crecimiento y desarrollo infantil.
No es casualidad que las leches de crecimiento contengan azúcares agregados en los países del Sur global que constituyen mercados en expansión para las fórmulas comerciales infantiles, en particular las llamadas de crecimiento identificadas con el N°3, y para los productos ultra-procesados en general. La habituación al sabor dulce a temprana edad incide en el persistente y elevado consumo de estos productos en la infancia y adolescencia.
El estudio llevado adelante por Public Eye e IBFAN logró documentar que en países seleccionados de América Latina los porcentajes de azúcares agregados en la leche Nido oscilaban entre 5,3 g por porción de 200 ml en Panamá, 4,7 g en Nicaragua, 1,8 g en México y 1,6 g en Costa Rica. Argentina no formó parte de esa investigación.
En el relevamiento periódico de envases de fórmulas comerciales infantiles que lleva adelante Fundación SANAR, se pudo constatar que Nido 3 en nuestro país tiene 4g de azúcares agregados por porción, equivalente a un terrón de azúcar, superando el 10% del valor calórico total, acercándose a los valores más altos de la región.
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